La pintura
es el arte de la representación gráfica utilizando pigmentos mezclados con otras sustancias
aglutinantes orgánicas o sintéticas. En este arte se emplean técnicas
de pintura,
conocimientos de teoría
del color y de
composición pictórica, y el dibujo. La práctica del arte de pintar, consiste en
aplicar, en una superficie determinada —una hoja de papel, un lienzo, un muro, una madera, un fragmento de tejido, etc.— una técnica determinada, para obtener una composición de formas, colores, texturas, dibujos, etc. dando lugar a una obra de arte según algunos principios estéticos.
El
arquitecto y teórico del clasicismo André
Félibien, en el
siglo XVII, en un prólogo de las Conferencias de la Academia francesa
hizo una jerarquía
de géneros de la
pintura clásica: «la historia, el retrato, el paisaje, los mares, las flores y
los frutos».
La pintura
es una de las expresiones artísticas más antiguas y una de las siete Bellas Artes. En estética o teoría
del arte modernos la
pintura está considerada como una categoría universal que comprende todas las creaciones artísticas hechas sobre
superficies. Una categoría aplicable a cualquier técnica o tipo de soporte
físico o material, incluyendo los soportes o las técnicas efímeras así como los
soportes o las técnicas digitales.
Definición
Una pintura
es el soporte pintado sobre un muro, un lienzo, o una lámina. La palabra
pintura se aplica también al color preparado para pintar, asociado o no a una técnica de
pintura; en este sentido es empleado en la clasificación de la pintura
atendiendo a las técnicas de pintar, por ejemplo: «pintura al fresco» o «pintura
al óleo».
La
clasificación de la pintura puede atender a criterios temáticos (como la
«pintura histórica» o la «pintura de género») o a criterios históricos basados
en los periodos de la Historia del Arte (como la «pintura prehistórica», la «pintura gótica») y en general de cualquier período
de la historia
de la pintura.
No hay nada
de malo en que nos deleitemos con la pintura de un paisaje porque nos recuerda nuestra casa o en un retrato porque nos recuerda un amigo, ya que como hombres que somos, cuando miramos una
obra de arte estamos sometidos al recuerdo de una multitud de cosas que para
bien o para mal influyen sobre nuestros gustos.